FABIANA RÍOS LE DIO A LOS K DE SU PROPIA MEDICINA.
En el fin del mundo, Cristina Kirchner apostó y perdió. Fabiana Ríos, gobernadora reelecta de Tierra del Fuego, todavía saborea el dulzor del triunfo con una pizca de revancha.
La Presidente se había mantenido expectante frente a las elecciones fueguinas. Es más, hasta el día de la primera vuelta, el 26 de junio pasado, el discurso oficial era que ganara quien ganara la Casa Rosada podía adjudicarse la victoria.
Compitieron Ríos, ex ARI de relación fluída con Kirchner, frente a Rosana Bertone, candidata por el Frente para la Victoria que llevó como compañero de fórmula a Martín Pérez, un joven politólogo de 31 años cercano a La Cámpora.
La equidistancia del Gobierno se quebró después de la primera vuelta, cuando Bertone le sacó 10 puntos de ventaja a Ríos y la Presidente convocó a la fórmula Bertone-Pérez a su despacho en la Rosada. Hubo foto y conversaciones sobre el futuro de la gestión durante casi una hora.
Ríos entendió que sí había favoritos, y que aquel discurso de confianza por la simpatía que demostró con el mundo K en los últimos cuatro años, no habían sido suficientes.
¿Cómo hizo para dar vuelta la elección y remontar en apenas siete días los puntos que le había sacado Bertone en la primera vuelta?, se siguen preguntando hoy en el Gobierno.
Ríos, que pasará a la historia como la primera gobernadora de la Argentina, redobló la apuesta presidencial y fue por los votos del senador nacional Jorge Colazo, del Partido Popular. El legislador es el mismo que fue destituído como gobernador por irregularidades en el manejo de los fondos provinciales en 2005. Fue también radical, aliancista, luego se transformó en kirchnerista fanático, pero no sorprendió a los fueguinos cuando se declaró "prescindente" en la segunda vuelta del domingo pasado, y comenzó a enviar a sus compañeros del Partido Popular, la agrupación que fundó, mensajes de texto pidiendo que voten a Ríos.
La recompensa ya está en marcha. Esta semana, Ríos y Colazo se reunieron para definir la participación de referentes del Partido Popular en el nuevo gabinete de la gobernadora con mandato hasta 2015.
Esta alianza no estuvo en los cálculos de Buenos Aires. Quedó demostrado en el vuelo que emprendió el ministro del Interior, Florencio Randazzo, el domingo después del mediodía por orden de Cristina.
Cuando despegó planeaba levantarle la mano del triunfo a Bertone, pero aterrizó y tuvo que ir al búnker de Ríos para expresarle su alegría por la reelección, con el 50,22 por ciento de los votos.
El daño ya estaba hecho. Ríos, rosarina y farmacéutica, ya había recibido su dosis de realidad y kirchnerismo explícito.
"La sociedad deicidió por un camino, aún contra los que planteaban que la única posibilidad de crecer era siendo parte del gobierno nacional. Sin embargo fue un acto de madurez su gesto democrático de irme a saludar", reflexionó la gobernadora luego, sobre la visita de Randazzo con foto y cara de circunstancia incluídas.
María Fabiana Ríos está acostumbrada a los cambios. Nació en Rosario, fue maestra, se recibió luego de farmacéutica, se casó y emigró al sur a fines de los 80.
Trabajó en una farmacia de Río Grande, fue empleada de la municipalidad, luego de la obra social de ATE, y cuando la despidieron por su pensamiento político decidió sumergirse en la política.
Primero militó en el Partido Socialista, agrupación por la que fue electa legisladora en 1999, luego se acercó al ARI de Elisa Carrió, de quien se alejó luego de convertirse en la primera gobernadora argentina en 2007. Hoy tiene agrupación propia: el Partido Social Patagónico.
"No estoy ni estaré jamás alineada al kirchnerismo. No es un sector político que me contenga ni que exprese en práctica política lo que yo creo de la política", dijo Ríos en los últimos días, y además adelantó que no tiene candidato presidencial para octubre. Suena a revancha.
El domingo pasado votaron 74.370 fueguinos. La provincia representa el 0,34 por ciento del padrón nacional. De allí que Ríos haya podido dar vuelta la elección sólo sumando un aliado hasta entonces oficialista declarado.
En definitiva, Fabiana Ríos aplicó el oficio, y le dio al kirchnerismo de su propia medicina.
Ahora con juego propio
* Fabiana Ríos fue electa en 2007 gobernadora de Tierra del Fuego, la primera mujer en ocupar ese cargo en la Argentina.
* Ahora acaba de ser reelecta en ballottage venciendo a Rosana Bertone, candidata K de última hora.
* Si bien la Rosada se había mantenido expectante, luego de la primera vuelta apostó por Bertone y perdió.
* Con error de cálculo, Randazzo viajó para felicitar a Bertone y terminó levantándole la mano a Ríos con visible incomodidad.
* Hoy Ríos saborea su triunfo con gusto a revancha.