Por Diario HOY.-
El gobierno sanjuanino había dicho que no existía contaminación luego de que se filtrara a los ríos de la zona de la mina Veladero cerca de 2 millones de litros de sustancias peligrosas. Una disposición judicial dejó en evidencia la mentira de los funcionarios K. La empresa Barrick Gold en la mira
La mentira tiene patas cortas. Así dicen en el barrio. Tras el derrame de cianuro (la empresa minera reconició 224 mil litros pero la cifra sería de dos millones) en los ríos de Las Taguas en San Juan, el gobierno provincial anunció que el agua no estaba contaminada. Los 800 vecinos que viven en un radio de 15 kilómetros de Jáchal tomaron ese aviso con dudas. Pero ayer advirtieron que se trató de una vil falsedad.
Es que el juez Pablo Oritja, el que investiga el derrame ocasionado por la empresa canadiense Barrick Gold en la mina Veladero, ordenó que el Ejecutivo entregue bidones con dos litros de agua potable por persona por día.
El dictamen del magistrado contradice al gobierno: el agua del río es un riesgo latente y peligroso para la comunidad de Villa Mercedes. Los habitantes de la zona de la mina Veladero tienen miedo que, desde la canilla de sus casas salga cianuro y afecte la salud. Y sabe que la entrega de agua en bidones solo es un parche a un problema de suma gravedad que demuestra el pésimo manejo de la política socioambiental del gobierno kirchnerista. En tanto, diputados provinciales de la oposición reclamaron la interpelación de funcionarios del gobierno de San Juan responsables de las áreas de Minería y Medio Ambiente, para que informen sobre el derrame de cianuro ocurrido el domingo en la mina Veladero. Los legisladores presentaron en la Cámara de Diputados el pedido para que se realice una "sesión urgente" en un "plazo de 48 horas", ante el vicegobernador Sergio Uñac, candidato oficialista a la gobernación. "Es alarmante las demoras, contradicciones e inconsistencias en la comunicación por parte de los organismos estatales encargados del área de Minería" sobre el derrame, advirtieron los legisladores en los fundamentos del pedido de interpelación. El pedido de interpelación fue presentado anteanoche con las firmas de los diputados Juan Manuel Sanso, Lucía Sánchez, Edgardo Sancassani, Leopoldo Soler y Miguel Martín Martín.
El dictamen del magistrado contradice al gobierno: el agua del río es un riesgo latente y peligroso para la comunidad de Villa Mercedes. Los habitantes de la zona de la mina Veladero tienen miedo que, desde la canilla de sus casas salga cianuro y afecte la salud. Y sabe que la entrega de agua en bidones solo es un parche a un problema de suma gravedad que demuestra el pésimo manejo de la política socioambiental del gobierno kirchnerista. En tanto, diputados provinciales de la oposición reclamaron la interpelación de funcionarios del gobierno de San Juan responsables de las áreas de Minería y Medio Ambiente, para que informen sobre el derrame de cianuro ocurrido el domingo en la mina Veladero. Los legisladores presentaron en la Cámara de Diputados el pedido para que se realice una "sesión urgente" en un "plazo de 48 horas", ante el vicegobernador Sergio Uñac, candidato oficialista a la gobernación. "Es alarmante las demoras, contradicciones e inconsistencias en la comunicación por parte de los organismos estatales encargados del área de Minería" sobre el derrame, advirtieron los legisladores en los fundamentos del pedido de interpelación. El pedido de interpelación fue presentado anteanoche con las firmas de los diputados Juan Manuel Sanso, Lucía Sánchez, Edgardo Sancassani, Leopoldo Soler y Miguel Martín Martín.
Marchas y reclamos por el esclarecimiento
Dos concentraciones se realizaron anoche, una en la capital provincial y otra en la ciudad de Jáchal, una de las más cercanas a la mina. Las asambleas vecinales divulgaron en las redes sociales cinco reclamos: el esclarecimiento del derrame, la puesta en marcha de un plan de contingencia y saneamiento urgente, la sanción a Barrick Gold y los organismos de control, la expulsión de la empresa canadiense del país por el incumplimiento de la normativa local y la prohibición de la megaminería en San Juan.
Detectaron falta de mantenimiento
El titular del Juzgado Letrado de Jáchal, Pablo Oritja, encabezó ayer una inspección ocular a la mina Veladero, de la empresa Barrick Gold, donde el domingo se derramaron inos 2 millones de litros de cianuro al río Las Taguas, en San Juan. Durante la visita surgió la primera hipótesis sobre las causas de la fuga: falta de mantenimiento más error humano.
El juez Oritja subió a la mina junto a cuatro fiscales designados ad hoc por la Corte de Justicia provincial, funcionarios del Ministerio de Minería y de Barrick Gold, y un grupo de peritos, entre ellos, un especialista de la Universidad Nacional de San Juan, Daniel Cabrera, quienes observaron que la válvula que falló había cumplido su ciclo de vida. La pieza fue secuestrada por Gendarmería y fue trasladada a la capital provincial para ser analizada.
La válvula en cuestión estaba en el valle de lixiviación, que es la zona en la que se rocía la tierra molida con agua y cianuro para separar el oro y la plata de la piedra. Al parecer, las sustancias que se derraman en ese proceso van a parar a un canal que termina en una pileta de contingencia. Pero todo depende de una compuerta que debía estar cerrada y estaba levantada, por lo que la "solución cianurada" terminó en el río.
La actividad de la mina Veladero fue suspendida el miércoles por orden judicial, por el término de cinco días.
“El modelo minero de Cristina es colonialismo puro”
Fernando Pino Solanas (*)
ESPECIAL PARA HOY
Esto es una tragedia anunciada. Ya hace 10 años que lo vengo denunciando. Roturas ha habido muchas y en muchas minas. Pero lo ha ocultado la contaminación política. Cuando desembarcan estas megamineras, estas corporaciones millonarias compran a los medios y meten en el negocio a la dirigencia local.
Yo he tenido debates enormes con los Gioja. Hace un mes los Gioja recibieron a todos los presidentes de las empresas megamineras para agasajar a los candidatos oficialistas a la presidencia de la Nación, y para que “garantizaran el exitoso modelo minero”. ¿Qué van a decir ahora?
Hay tres pueblos que no pueden tomar agua en una provincia vitivinícola de excelencia. Es una locura lo que está pasando. Este es el modelo minero de Cristina Kirchner y de una enorme irresponsabilidad, porque la producción minera es colonialismo puro. Los metales no son refinados en Argentina y nadie sabe lo que exportan las empresas.
Esto es un acto contrario a los intereses nacionales, todo por 300 o 400 puestos de trabajo. Y cada minera con lo que roban y no denuncian se llevan millones de dólares.
Y el gobierno sanjuanino se comporta como un vocero de la Barrick ocultando información, ignorando y minimizando la gravedad de esta terrible situación. El hecho tomó estado público solo gracias a la preocupación de los vecinos.
(*) Presidente de la Comisión de Ambiente y Desarrollo Sustentable del Senado de la Nación