Foto: Emiliano Lasalvia |
Por Pablo Fernández Blanco/La Nación.-
La temperatura disparó el consumo y ocasionó interrupciones que podrían aumentar hoy; el Gobierno admitió los problemas; protestas con cacerolas en varios barrios
Un autoservicio de Juramento al 1600, ayer, a oscuras; los problemas podrían continuar hoy. El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, tuvo una premonición hace aproximadamente 10 días. Con el país agobiado por la proliferación de saqueos, temió que la prolongación de los cortes de luz que había provocado la última tormenta estimulara el caos.
Le pidió a Roberto Baratta, coordinador del Ministerio de Planificación, que organizara un encuentro con los principales empresarios del sector eléctrico. La reunión se hizo el lunes pasado en el Salón Dorado de la Casa de Gobierno.
Un puñado de empresarios, entre ellos los jefes de Edenor y de Edesur, las distribuidoras que prestan el servicio en la Capital Federal y el conurbano bonaerense, se sentaron a la mesa. Sólo se habló del restablecimiento del servicio y de los eventuales problemas que se esperaban para esta semana. Y acordaron lanzar ayer, bajo la firma de Adeera, la asociación que reúne a las empresas distribuidoras, una publicidad para pedirles a los consumidores que usen racionalmente la energía.
Capitanich tiene malas experiencias con la luz. En octubre de 2012 se debió suspender el partido de fútbol que iban a disputar la Argentina y Brasil en Resistencia por un apagón en el Estadio Centenario. Con ese recuerdo, anotó en su tablet cada palabra que expresaban los empresarios. Sabía del tema, porque Secheep, la distribuidora de Chaco, es provincial.
Siete días después del encuentro, la premonición del jefe de Gabinete se convirtió en una profecía.
Las altas temperaturas provocaron un récord en la demanda de electricidad, que a las 15 alcanzó los 23.334 megavatios (MW) -un 3,5% más que el 22 de julio-, según Planificación. La combinación ocasionó en barrios porteños y en la provincia una multitud de cortes de luz, que a su vez desataron protestas en Villa del Parque, Caballito y Paternal, donde los vecinos organizaron cacerolazos en reclamo del restablecimiento del servicio.
A primera hora de la tarde, en una suerte de anticipo inédito, el ministro de Planificación, Julio De Vido, había avisado que las probabilidades de problemas eléctricos en los próximos meses serían mayores. "Este verano vamos a estar 1500 megavatios arriba del verano anterior [en consumo] y la posibilidad de corte se va a incrementar, por mayor demanda", reconoció. Horas más tarde se retractó.
Diana Irusta, que vive en el límite entre San Cristóbal y Boedo, se quedó sin luz al mediodía. La misma suerte corrió Jorge San Martino, vecino de Recoleta, justo cuando la demanda de energía alcanzaba el récord. Mayor fue la molestia de Laura Messina, que vive en Gaona al 4400, en Floresta, con problemas desde hace semanas. También hubo cortes en Parque Patricios, Villa Crespo, Núñez, Belgrano, Villa Urquiza y Parque Chacabuco.
En la provincia, en tanto, hubo problemas en Lanús, Castelar, Ituzaingó, Isidro Casanova, Florida, Beccar y Monte Grande, entre otros lugares.
TENSA CALMA
Las empresas, sin embargo, sostuvieron que el día había pasado sin grandes sobresaltos. Tanto Edenor como Edesur destacaron que las interrupciones en el servicio no habían sido masivas, sino aisladas y de pronta reparación. Culpan por los cortes al uso de acondicionadores de aire. Según números privados, en los últimos años se vendieron cuatro millones de aparatos, que consumen unos 1500 MW en el momento de máximo consumo. Es el equivalente, por caso, a dos centrales eléctricas de gran porte, como San Martín o Belgrano. En los últimos años, algunos en el sector reclamaron ponerle un límite a su venta con la bandera del "uso racional de la energía", la misma que agitó ayer el Gobierno.
En despachos públicos y en las empresas temen por lo que ocurrirá hoy, debido a que las altas temperaturas continuarán. Su cuenta es sencilla: a medida que se extiende la exigencia al sistema aumentan las probabilidades de cortes. Creen que la situación mejorará mañana, cuando llegue la lluvia que está pronosticada. El jueves, sin embargo, el calor volverá a ser agobiante, al igual que el viernes.
CONVIVIR CON LOS CORTES DE LUZ
Alejandra Rey
"Yo estuve con cortes de luz desde la 1 de la tarde hasta las 8 de la noche en la zona de las Lomas de San Isidro. A una cuadra vive la hija de Daniel Scioli"
Gerardo Sánchez
"Estuve toda la noche sin luz, y por lo tanto sin un mísero ventilador. Desde las 2 hasta las 8. Un desastre"
Laura Messina
"Desde hace semanas tenemos problemas. Nos cortan por fases en el edificio, y en el barrio alternan los locales con luz y sin luz. También fallan los semáforos. Todos los días tenemos cortes de entre 4 y 5 horas diarias, sin previo aviso. Nos toman el pelo, no se puede programar nada. En Edesur sólo podés mandar sms porque el 0800 está colapsado. Llamé para reclamar al ENRE y me atendió un contestador"