Por Julián Guarino Subeditor de Finanzas/El Cronista.-
El gobernador Scioli dio en la tecla: propuso cambiar la etiqueta de “blanqueo” por algo que resulte más realista: “repatriación”. Porque parece que lo único que llegará del exterior será dinero en blanco, es decir, declarado, que paga impuestos y que no reviste un “riesgo reputacional” para aquél que busque suscribir el bono Baade. Tal como anticipó El Cronista, el Banco Central trabaja en un conjunto de medidas que irá en este sentido: buscarán asegurar un mercado secundario (para que las empresas puedan vender el bono “contra pesos”) a un tipo de cambio cercano al blue, y el levantamiento del encaje a los capitales del 30%.
No es casualidad que el Grupo Bridas anunció ayer que traerá u$s 500 millones para suscribir el título: pidió a cambio varias condiciones, algunas de ellas que ya prepara el BCRA. La razón es obvia: ¿Por qué alguien suscribiría un bono que paga 4% anual de tasa si puede comprar un bono similar, emitido también por Argentina y a un plazo similar por un 12% anual de tasa?
El patriotismo tiene sus límites. A cambio de su promesa de inversión, Bridas quiere que se le de participación en la explotación de hidrocarburos de Vaca Muerta, en Neuquén. Para ello, el esquema propuesto por la compañía es traer los u$s 500 millones en forma escalonada, que el Banco Central los incorpore a las reservas, y que el Ministerio de Economía entregue a cambio Baade por u$s 500 millones. Pero Bridas, a la hora de invertir, utilizará sus pesos argentinos (no sus dólares) para ‘hundir’ en Neuquén. En rigor, los dólares de Bridas tienen garantía: en 2016, esos mismos dólares serán reintegrados y las “pérdidas” –la diferencia entre una tasa al 4% y una al 12%– probablemente se vea compensada. Para los próximos días es probable que este mecanismo –o uno que filosóficamente vaya en el mismo sentido– sea negociado por cerealeras y otras firmas. Incluso no se descarta que los bancos puedan darle forma a una propuesta que, por ahora, parece no prosperar. En definitiva, el Gobierno deberá hacer más concesiones para que le presten dólares.
