Se trata de comicios anticipados - deberían haberse celebrado en 2010- pero oficialistas y oposición acordaron a finales de 2008 adelantarlos en aras al consenso tras la crisis política vivida en Bolivia el año pasado.
Más de 5,1 millones de bolivianos están convocados hoy a las urnas para elegir al presidente del país, en unos comicios generales donde el izquierdista e indigenista Evo Morales parte como claro favorito para revalidar su mandato por cinco años más. La tranquilidad ha sido la tónica en Bolivia en las horas previas a la cita electoral a la que están convocados 5.138.583 ciudadanos, una cifra récord en el país. De esa cifra, 4.969.487 están inscritos en Bolivia y 169.096 en ciudades de Brasil, España, Argentina y Estados Unidos, donde votarán los emigrantes bolivianos por primera vez. Hoy, Bolivia votará para elegir presidente, vicepresidente y a los 130 diputados y 36 senadores que conformarán la futura Asamblea Plurinacional de Bolivia, como se denomina con la nueva Constitución al anterior Congreso Nacional. Se trata además de comicios generales anticipados, pues deberían haberse celebrado en 2010 pero oficialistas y oposición acordaron a finales de 2008 adelantarlos en aras al consenso tras la crisis política vivida en Bolivia el año pasado. Tras cuatro años de mandato marcados por la polarización política, Morales llega al 6 de diciembre como rotundo favorito en todas las encuestas, que le dan un apoyo superior al 50 por ciento y una ventaja de unos 30 puntos sobre sus rivales, es decir, una cómoda victoria en primera vuelta. Frente a Morales concurren a los comicios siete candidaturas opositoras, la principal, según las encuestas, la de Plan Progreso Bolivia-Convergencia Nacional (PPB-CN), cuyo aspirante a la Presidencia es Manfred Reyes Villa, ex prefecto de Cochabamba. Otras candidaturas son Unidad Nacional (UN), liderada por el próspero empresario paceño Samuel Doria Medina, y la Alianza Social (AS), del ex alcalde quechua de Potosí René Joaquino. También concurren Pueblos Unidos por la Libertad y Soberanía (PULSO), del campesino Alejo Véliz; Agrupación Ciudadana GENTE, del ex oficialista Román Loayza; Movimiento de Unidad Social Patriótica (MUSPA), de Ana María Flores, y Bolivia Social Demócrata, del ex fiscal Rime Choquehuanca. Ante la coincidencia de los sondeos sobre la victoria de Morales, la incógnita de estos comicios radica en qué porcentaje de apoyo conseguirá y qué tipo de mayoría parlamentaria logrará su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS). Morales, que en diciembre de 2005 llegó a la Presidencia con un inédito 53,7 por ciento de apoyo, quiere una mayoría cualificada de dos tercios para desarrollar sin problemas la Constitución aprobada a principios de año y con la que busca refundar el país al plantear una nueva estructura del Estado y una nueva institucionalidad. De forma paralela a las elecciones generales, el domingo se celebrarán en Bolivia hasta 18 consultas de índole autonómico, cinco de ellas departamentales en La Paz, Oruro, Potosí, Cochabamba y Chuquisaca. También los habitantes de la sub-región del Chaco, al sureste del país, serán consultados sobre la adopción de un régimen autonómico regional y doce municipios celebrarán referendos para decidir si quieren ser "autonomía indígena". La concurrencia de los comicios generales y estas consultas ha obligado a la Corte Nacional Electoral (CNE) a diseñar hasta seis papeletas de votación. Así, las elecciones del domingo estarán también marcadas por las novedades, las más importantes, la aplicación de un nuevo padrón biométrico y el voto exterior. Unos 50.000 miembros de las fuerzas de seguridad bolivianas se encargarán de que la votación discurra sin problemas en las 22.742 mesas y 1.700 recintos electorales previstos por todo el país que abrirán de 8 de la mañana a 4 de la tarde hora local. Varios organismos internacionales han enviado a Bolivia misiones de observación para evaluar la transparencia y calidad democrática de estas elecciones. Es el caso de la Unión Europea, con una misión de 134 observadores dirigidos por la eurodiputada rumana Renate Weber; la Organización de Estados Americanos (OEA), con 124 veedores coordinados por el colombiano Horacio Serpa, y el Centro Carter, que desplazó a 22 personas a Bolivia. FUENTE: ÁMBITO FINANCIERO