LA PRESIDENTE Y BINNER: ALIADOS ESTRATÉGICOS, TIBIOS ADVERSARIOS ELECTORALES
En Rosario, él insistió en pedirle que convoque al diálogo y ella lo reprendió.
Áspero cruce público entre Cristina y Binner a un mes de las elecciones. Se interpelaron mutuamente en sus discursos. El gobernador volvió a pedir diálogo. Para la Presidente, los ciudadanos “deciden con el voto”. A un mes de enfrentarse en las elecciones presidenciales, Cristina Fernández de Kirchner y Hermes Binner reeditaron ayer sus cruces públicos. Él disparó desde el comienzo de su discurso: “La recibimos como Presidenta de todos los argentinos y no como jefa de un partido”. Ella no se quedó atrás: “No se preocupe gobernador Binner que cuando tomamos decisiones no nos fijamos en el color político”.
El contrapunto, por supuesto, no terminó ahí. Durante su discurso en la inauguración del Instituto de Biología Molecular, en Rosario, Binner insistió en pedirle a la mandataria que llame a un diálogo amplio. “Solicitamos en forma pública un diálogo abierto, constructivo, serio sobre los principales problemas del país”, indicó al promediar su intervención, ratificando la idea de la carta que le envió semanas atrás y que Fernández de Kirchner nunca le contestó.
“No voy a instalar una respuesta, no he venido para eso a Rosario. Pobre y flaco favor le haría a la sociedad, instalar debates que son para otros ámbitos y que seguramente la ciudadanía evalúa, como hace siempre, a través de la forma más cristalina que es a través de los votos. El resto nos tenemos que ocupar de gobernar”, le respondió la mandataria. Exhibió además las cifras de los programas de asistencia para parques industriales y enfatizó que “el 40 por ciento de esos fondos se destinaron a Santa Fe”; dato que aprovechó para dirigirse al socialista sin ambigüedades: “No se preocupe gobernador Binner que cuando tomamos decisiones no nos fijamos en el color político”, chicaneó.
El escenario del acto conjunto estaba caldeado desde la previa. Binner había denunciado el domingo que, ante la llegada de la Presidenta, 30 camiones descargaban electrodomésticos para repartir entre los rosarinos en el predio de Gendarmería Nacional. Y, minutos antes de que comience el acto, unas 150 personas que esperaban a Cristina insultaron a Binner y le dedicaron cantos tildándolo de “gorila” y “vende patria”.
Sin embargo, y más allá del cruce, el candidato presidencial del Frente Amplio Progresista (FAP) sigue siendo el único opositor al que la Presidenta le concede fotos conjuntas y le responde. Y, claro, él aprovecha esa circunstancia para mostrarse como alternativa frente al oficialismo, cuando las encuestas lo muestran en ascenso para las elecciones del 23 de octubre y luego de que otros opositores lo acusaran de ser funcional al kirchnerismo. “Nosotros tratamos de avanzar en una democracia mejor y esto tiene que ver con el diálogo y con escucharnos. No creemos bueno que haya nada más que un monólogo”, explicó ayer Binner a El Cronista, tras el cruce con Cristina.
El gobernador lamentó que la Presidenta “no ha respondido” la carta que le envió y ni siquiera “tomó el tema en su discurso”. Tampoco hablaron al respecto en el trayecto que separa al Instituto del aeropuerto. Camino que hicieron juntos.
