¿INNOVACIÓN TÉCNICA O CIRCO ELECTORAL?
Mientras el Gobierno anunció con bombos y platillos el hallazgo de un importante yacimiento hidrocarburífero, especialistas aseguran que se trataría "de un gran fraude".
En momentos en que la petrolera YPF daba a conocer el descubrimiento de yacimientos no convencionales de hidrocarburos en Loma La Lata, provincia de Neuquén, que contendrían más de 150 millones de barriles equivalentes de crudo, la presidenta Cristina Fernández anunciaba por videoconferencia que “este es un hallazgo de YPF, pero también de todos los argentinos”, que “apalanca el crecimiento” del país.
La realidad es totalmente diferente. Con el proceso de privatización del petróleo -que tiene plena vigencia-, el Estado vendió 250 millones de metros cúbicos de reservas “probadas” que pasaron a compañías privadas como Repsol y, desde el Gobierno K, al Grupo Eskenazi. Desde 1993 hasta hoy se produjeron más de 500 millones de metros cúbicos de petróleo crudo y quedaría actualmente, en los yacimientos, una reserva “probada” de sólo 450 millones de metros cúbicos, “oficialmente” certificados. El 95% del total de estas reservas corresponde a los viejos yacimientos de la YPF estatal. Y no se han descubierto nuevos yacimientos de importancia después de la privatización. Por ello, muchos especialistas estiman que, en menos de diez años, nuestro país pasará a ser exportador de petróleo crudo a ser importador. La supuesta localización del “oro negro” que se anunció ayer se realizó en un área de 330 kilómetros cuadrados con espesores promedio de 250 metros. Según la compañía, en lo que resta del año se perforará 17 nuevos pozos y se fracturará 14 pozos existentes, lo que supone una inversión total estimada de 270 millones de dólares, de los cuales ya se invirtieron 100 millones, indicó la compañía. Del anuncio participaron el CEO y director general de YPF, Sebastián Eskenazi, el gobernador provincial, Jorge Sapag, y el ministro de Planificación Federal, Julio de Vido. El directivo de la empresa, de relación histórica con el kirchnerismo (se remonta a los años ‘90, cuando Néstor y Cristina era fervientes impulsores de las privatizaciones), sostuvo que “lo importante de este descubrimiento no es el volumen, es el punto de que es algo nuevo, se trata de un hito técnico de los argentinos”.
Especialistas dialogaron con Hoy y desplegaron un manto de sospecha sobre lo que se anunció. “Hasta ahora es una propaganda mediática para un grupo empresario amigo del Gobierno. El descubrimiento termina siendo el 5% de las reservas actuales comprobadas. No es un descubrimiento que podría llamar la atención en ningún lugar. Estamos viviendo una propaganda: para tapar la estrepitosa caída de las reservas de gas y petróleo, aparece una campaña”, indicó a este medio Félix Herrero, director del Instituto de Proyectos de Proyecto Sur a nivel nacional. Herrero remarcó que “no está todavía la prospección terminada, esto puede ser una defraudación más a la opinión pública. El día que tengan comprobados los metros cúbicos de petróleo, podremos decir que el descubrimiento ha sido eficaz. Pero el anuncio es más cercano a la campaña electoral que a los intereses de la industria petrolera nacional”.
Lo que el Gobierno no menciona
La lógica perversa de la tercerización que utilizan las empresas amigas del Gobierno no evade la situación de Repsol ni de Eskenazi. El esquema privatizador de YPF no puede circunscribirse sólo a los ‘90, ya que durante el kirchnerismo la situación no se modificó.
Uno de los mecanismos que sostiene la actual gestión para sacarse de encima a los empleados de la compañía fue la creación de cooperativas tercerizadas. “En la zona se formalizaron las cooperativas. Daban los contratos a dos años y muchas de ellas quedaron el camino y algunos se quedaron sin trabajo”, afirmó a este medio uno de los empleados, despedido en el año ‘92 y que volvió a trabajar a través de dicho mecanismo. Se estima que, de siete cooperativas, que nucleaban cerca de 1.700 personas, sólo tres quedaron en funcionamiento. “YPF echó en el ‘91, y después Repsol siguió echando gente”, concluyó el trabajador que hasta el día de hoy permanece en una de las cooperativas de forma precaria, sin que la empresa lo reconozca como empleado legítimo. “Empezaron a tercerizar, igual que lo hacen ahora con los ferrocarriles”, señaló a Hoy Carlos Guaciarrosa, quien era delegado de la petroquímica Mosconi.
Cautela de tres exsecretarios de Energía
Tres exsecretarios de Energía coincidieron en mostrar cautela ante el anuncio del hallazgo de un yacimiento de hidrocarburos en la provincia de Neuquén, al señalar que hay que diferenciar recursos de reservas probables, y a éstas de las comprobadas, y que las últimas no alcanzarían a compensar la caída registrada en la última década. Así lo señalaron Jorge Lapeña (exsecretario de Raúl Alfonsín), Emilio Apud (de Fernando de la Rúa) y Alberto Devoto (de Eduardo Duhalde).
“No salgamos a decir que este petróleo ya está disponible, porque no es así. El anuncio está teñido de la necesidad de la empresa (por YPF) de compensar la abrupta caída de sus reservas del 48% entre 2002 y 2009”, aseguró Apud. Para Devoto, “es dudosa la forma del anuncio y dudosa la terminología, porque bajo ningún punto de vista técnico, recursos son reservas. Las reservas tienen que estar debidamente comprobadas”, dijo. Lapeña indicó que fue “un anuncio positivo en un contexto de caída de las reservas espectacular desde hace diez años”, y precisó que “no son reservas probables ni comprobadas, se habla de recursos potenciales, no se sabe qué cantidad tienen y no se puede determinar si lo pueden colocar en el mercado”.
Callejas y las “mentiras”
“El descubrimiento del gas en esa misma zona fue una gran mentira, porque al final no hay nada. Vuelvo a decir lo mismo que dije en ese momento: hasta que no lo presenten a la comisión de valores de Nueva York no se puede confirmar nada”, señaló a Hoy Gustavo Callejas, exsubsecretario de Combustibles de la Nación.
Tras las sospechas actuales, reflota el antecedente del hallazgo de gas
El escenario montado se pareció bastante al ocurrido a principios de diciembre del año pasado, cuando los mismos actores anunciaron el descubrimiento de 4,5 TCF (billones de pies cúbicos) de gas en la provincia en cuestión. “Lo del gas fue una exageración total, porque llegaron a decir que Argentina estaba tercera entre los países, después de China y Estados Unidos, en lo que respecta al gas convencional”, advirtió Herrero. “El anuncio del megayacimiento en Neuquén es un verdadero megafraude. Con bombos y platillos, YPF SA anunció el descubrimiento de un megayacimiento de gas en Loma La Lata, que ampliaría el horizonte de reservas a 16 años, más de doble del que tenemos actualmente”, habían denunciado desde el Movimiento para la Recuperación del Petróleo, quienes además aseguraron que lo sucedido era “un engaño” de los “monopolios” del sector. Asimismo, aseguraron que “hasta ahora en nuestro país no tenían valor comercial, por lo tanto las empresas no las podían contar como reservas para sus activos. En la medida que el Estado les vaya concediendo el precio que ellas pretendan, podrían sacar y vender el petróleo, entonces las contabilizarían como reservas y aumentarían los activos de las empresas, sin haber hecho ningún esfuerzo exploratorio”.
Para Cristina, sustenta y promueve “el desarrollo”
“Va a permitir seguir sustentando, sosteniendo y promoviendo -aún más- el desarrollo de los argentinos”, señaló la presidenta Cristina Fernández en relación al descubrimiento de petróleo en Neuquén.
