LA JUSTICIA INTERVINO EL SINDICATO DE PETROLEROS DE SANTA CRUZ.
La Justicia de Santa Cruz ordenó la intervención del gremio de los petroleros como respuesta al paro que lleva 22 días. El líder de una de las facciones del gremio amenazó con nuevas medidas. El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, anunció el envío de un representante a esa provincia con el objetivo de "garantizar el normal funcionamiento" del gremio. La justicia santacruceña intervino hoy el Sindicato de Petroleros Privados de Santa Cruz por pedido del gobierno provincial tras 21 días de conflicto que mantiene paralizada la producción hidrocarburífera. El pedido de reposición lo presentó el fiscal de Estado, Carlos Ramos ante el juzgado de Instrucción N° 1 de Caleta Olivia a cargo del juez Mario Albarrán. La medida fue presentada por la provincia ya que considera que "hay una situación anárquica dentro del sindicato, incumplimiento de una conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo de la Nación y sumado a los graves perjuicios económicos que este conflicto acarrea para la provincia" sostuvo Raúl Santibañez, secretario de Trabajo de Santa Cruz. El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, anunció hoy el envío de un representante a esa provincia con el objetivo de "garantizar el normal funcionamiento" del gremio. Según explicó Tomada, la decisión se tomó como respuesta a la resolución del juez de instrucción de Caleta Olivia, Mario Albarran, que dispuso la suspensión de Héctor Segovia y Rubén Retamozo, en la dirección del Sindicato, y que facultó a la Federación Argentina Sindical del Petróleo a que los ratifique en el cargo o adopte otra medida normalizadora. Mientras tanto, el sindicalista petrolero, Héctor Segovia, aseguró hoy que no va a renunciar y se opuso a la intervención del gremio que pidió el gobernador de la provincia de Santa Cruz, Daniel Peralta. El secretario general del gremio dijo que le llamaron "poderosamente la atención" las declaraciones del mandatario provincial y ratificó que para cambiar la conducción del sindicato "tendrán que esperar las elecciones del año que viene".
El conflicto sindical, que tiene hace más de 20 días parada la producción en la provincia austral, es producto de una interna personal entre Segovia y el secretario adjunto del gremio, Rubén Retamoso, quien intenta desplazarlo."El gobernador parece que estuviera de acuerdo con que siga el paro, por la forma en la que se lava las manos", dijo Segovia en declaraciones radiales y anticipó que "la próxima semana definiremos en asamblea si hacemos un quite de colaboración".
El miércoles pasado, en una asamblea con más de 1.000 trabajadores, los delegados que se oponen a Segovia condicionaron el fin de la huelga a su renuncia y al alejamiento de otros dos miembros de la comisión directiva del gremio.
Distintos actores políticos y del sector petrolero advirtieron que de prolongarse la medida de fuerza, habría una fuerte repercusión a nivel nacional, con el temor de que comience a faltar combustibles.
FUENTE: lapoliticaonline
