España: un gremio se llevó alimentos de supermercados en una "expropiación forzosa". La acción ocurrió en una sucursal de la cadena Mercadona y en una sede de Carrefour. Los trabajadores del sindicato andaluz tomaron mercadería de primera necesidad y se retiraron con 9 changuitos. En otro caso, negociaron y les donaron 12 carritos. Afirman que es "para que la gente pueda comer" Unos 200 afiliados del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) se llevaron este martes nueve changuitos con alimentos para entregar en un comedor social, en una medida que los dirigentes del gremio calificaron como "una expropiación forzosa", en medio de la crisis económica y los ajustes impuestos por el Gobierno español. La acción tuvo lugar en una de las sucursales que la cadena Mercadona tiene en Sevilla, donde los manifestantes llenaron diez changos con mercadería de primera necesidad, como aceite, azúcar, arroz, pastas secas, leche, galletitas y legumbres.
Cuando intentaron salir del establecimiento sin abonar, se produjeron incidentes entre éstos y la guardia privada, hasta que se hizo efectivo el arribo del personal policial.
Pese a todo, los trabajadores lograron retirarse con nueve de los changuitos, que los cargaron en una furgoneta para llevarlos a un centro de alimentos de Sevilla.
Al frente de la protesta estuvo el secretario general del SAT, Diego Cañamero, quien explicó que la acción consistió en la "expropiación" de alimentos de primera necesidad "para que la gente pueda comer".
Cañamero expplicó que esta situación "es muy dura" para muchas familias. "Hay colas en las puertas de los Servicios Sociales de los ayuntamientos. La gente no tiene dinero para pagar su casa, ni la electricidad ni el agua. Hay morosos en los pueblos y muchas familias tienen cortada el agua. Por eso, hemos venido a hacer esta propuesta".
En tanto, los responsables jurídicos de Mercadona anunciaron que harán una denuncia por sustracción de alimentos y por las lesiones leves que sufrieron los guardias, según informó EFE.
Un vocero de la empresa subrayó que son conscientes de la crisis económica "preocupante" y que la mejor forma de solucionarla es creciendo y creando empleo, lo que ellos hicieron en año pasado en Sevilla con 300 personas y 1.200 en toda Andalucía.
Una acción similar tuvo lugar en Arcos de la Frontera, en Cádiz, en un supermercado de la empresa Carrefour, aunque con un final distinto. A las once de la mañana, más de 200 desempleados agrícolas y representantes del SAT entraron en la gran superficie con la intención de llevarse más de 20 carros cargados de alimentos sin pagar.
Agentes de la Guardia Civil se trasladaron hasta el establecimiento e impedieron a la altura de las cajas la salida de los trabajadores con los carros, en una protesta que se saldó "sin incidentes".
Tras cuatro horas de negociación, el alcalde de la localidad serrana de Espera y miembro del SAT, Pedro Romero, los sindicalistas y los representantes de Carrefour acordaron la donación de doce carros de alimentos para los servicios sociales de los ayuntamientos de Bornos, Puerto Serrano y Espera.
