Por iProfesional.- Desde la Cámara de Exportadores aseguraron que implicaría un error, como ya sucedió con el sector energético y con la industria de la carne
La presidenta Cristina Kirchner planteó que uno de los grandes desafíos que plantea la actual crisis internacional es la necesidad de "sustituir exportaciones con mercado interno", debido a la situación que atraviesan los principales socios comerciales de la Argentina.
"Vamos a tener que sustituir exportaciones con mercado interno, porque no nos compran afuera porque se cayó el mundo", dijo Cristina anoche durante el acto central por el Día de la Industria, en Tecnópolis, en el que participaron alrededor de 3.000 empresarios de todos el país.
En su discurso, que se extendió por espacio de alrededor de ochenta minutos, dijo que la “demanda es la que guía la inversión” y que el país “necesita que el sector privado siga invirtiendo más para tener el mismo rango de inversión que ha tenido el Estado Nacional”.
La Presidenta volvió a advertir sobre la crisis económica internacional, con caída de precios de los granos, el petróleo y otras materias primas, y puso de manifiesto la situación por la que atraviesa Brasil: "Nuestro principal socio comercial (Brasil) está atravesando una fuerte crisis".
Antes este adverso panorama "vamos a tener que hacer un esfuerzo doble en lo político y en la cohesión entre el trabajo y el capital, no ya para sustituir importaciones, como venimos haciendo, sino también sustituir exportaciones", apelando al mercado interno, destacó.
Aseguró que este vuelco hacia el mercado interno no se debe “a que no somos competitivos”, sino a la falta de demanda del exterior y ante la necesidad de dar salida a la producción nacional, de manera de preservar el empleo.
Frente a esas declaraciones de la mandataria, la Cámara de Exportadores de la República Argentina (CERA) publicó un duro comunicado a través del cual señalaron que la idea de sustituir ventas al mundo con el mercado interno “es equivocada”.
Cabe destacar que la CERA está integrada por entidades de peso, como la Cámara Argentina del Acero (que nucela a firmas de la talla de Acindar, Ternium y Tenaris) y la de Laboratorios Farmacéuticos (integrada por empresas como Bagó, Biosidus y Roemmers, entre otras).
A través del documento, el titular de la CERA, Enrique Mantilla, consideró que “la idea de sustitución de exportaciones es equivocada como ya se experimentó con la política energética. No se desarrollaron los recursos propios y hoy somos importadores netos”.
Según la entidad, “en las últimas décadas se han seguido políticas basadas en dicotomías como sustitución de importaciones vs exportaciones, liberalización vs política industrial. Centrarse en las dicotomías olvida que exportaciones, importaciones, crecimiento e inclusión social son complementarios y no sustitutos”.
Acto seguido, recordaron el error cometido con las restricciones a las exportaciones de carnes, que derivaron en “pérdidas del stock de cabezas y cierres de frigoríficos”.
Además, consideraron que la estrategia oficial no hará más que incrementar el problema de la falta de dólares: “En la actual estructura productiva argentina, la elasticidad importaciones-ingreso es más alta que la de las exportaciones. Por eso, sustituir exportaciones es promover un endeudamiento insostenible”.
Frente a esto, concluyeron que, antes que concentrarse en la demanda doméstica y desatender los mercados internacionales, “en el actual escenario mundial de deflación, la respuesta más consistente es una estrategia exportadora para el desarrollo sostenible, basada en la productividad como motor de la competitividad”.