Por lapoliticaonline.-
El gobernador presionó para hacer un gran acto del Día de la Lealtad con la reinauguración de la fábrica SIAM, que inicialmente estaba preparado para Cristina. El Gobierno se negó de plano, dio de baja la inauguración y convocó a un acto en la Plaza de Mayo sin oradores.
Daniel Scioli no consiguió que el Gobierno le avalara un acto masivo en la reinaguración de la fábrica Siam de Avellaneda, para celebrar el 17 de Octubre y coronar la campaña de Martín Insaurralde, a 10 días de las elecciones legislativas donde no hay encuesta que no lo dé perdedor ante Sergio Massa.
El acto estaba originalmente pautado para Cristina Kirchner, pero el gobernador lo quiso liderar y así se lo hizo saber anoche a Juan Manuel Abal Medina. Sin embargo, desde el corazón del kirchnerismo rechazaron de plano la idea, al punto que directamente pidieron cancelar la simbólica reinaguración hasta que se reincorpore Cristina, prohibiéndole a Scioli encabezarla por su cuenta.
No contentos con eso, como acto central del Día de la Lealtad, convocaron a una movilización a Plaza de Mayo sin oradores, ni figuras centrales.
Todo con tal de no relagarle a Scioli es escenario, lo que vuelve a arrojar enormes dudas sobre la real vocación del kirchnerismo de bendecirlo como sucesor.
"Prefirieron que nadie capitalice a que capitalice Scioli, fue una reacción brutal, pero clarísima", afirmó a LPO una fuente de acceso frecuente al gobernador. La movida se complementa además con otra primicia de LPO: En el Gobierno decidieron que no habrá un bunker central del Frente para la Victoria el domingo d elas elecciones y en todo caso será Scioli quien deberá poner la cara la noche de lo que se estima, será una derrota importante.
Tan evidente es la distancia marcada, que Scioli no se cruzó con el kirchnerismo en todo el día. La tensión empezó a ser visible a la mañana cuando tuvo que improvisar un acto en el Teatro Roma de Avellaneda para -sugestivamente- anunciar que "en pocos días más" la fábrica sería inaugurada por Cristina.
Esta explosiva revelación que contradice los 30 días de "reposo absoluto" que indicaron los médicos, fue cruzada de plano por la Rosada.
El malestar no podía ser más evidente cuando, a la tarde y desde Plaza de Mayo, Abal Medina habló con C5N para bajarle el pulgar a la expectativa de una vuelta anticipada de la Presidenta al poder. "Estamos deseosos de que esté con nosotros cuando sus médicos lo digan. Esto no depende de decisiones políticas sino de lo que digan los médicos”, afirmó tajante.
De hecho, la Casa Rosada no sólo le bajó la inauguración de Siam, sino que además prohibió a todas sus estructuras militantes que vayan al improvisado acto en el teatro Roma.
Acaso como parte de esa guerra fría, Scioli eludió la convocatoria a la Plaza de Mayo y prefirió reunirse con un puñado de gobernadores en la ciudad de Santa Fe, para participar de un acto de Gestar -el Instituto de Capacitación del PJ que funciona en los hechos como una peña de gobernadores peronistas-, en apoyo a la candidatura de Jorge Obeid.
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Scioli en el encuentro de Gestar en Santa Fe.
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Nada casual: Para esa hora el gabinete en pleno bajaba a la Plaza de Mayo para sumarse a la concentración que no tuvo oradores, con la única consigna de levantar las banderas en un abrazo simbólico a Cristina.
El regreso de la tensión entre Scioli y el kirchnerismo a 10 días de las elecciones acaso preanuncia un posible escenario post electoral, en el que el gobernador buscará en vano sumar a los sectores más ultras del Gobierno a su proyecto presidencial.
El mensaje de esta noche fue contundente: "Es preferible nadie antes que Scioli". Al menos, eso se trasunta de la decisión de La Cámpora, Zannini y los movimientos sociales que hoy se reunieron en la Plaza de Mayo.
Son quienes por estas horas intentan apuntalar la figura del gobernador de Entre Ríos Sergio Urribari, para acaso representar en el 2015 a esa franja que esta noche se expresó sin palabras en la Plaza de Mayo.
