LA CAJA, PERO DE PANDORA

ATILRA filial Rosario escapa bastante a las generales de la ley. Ha sido y es un gremio que ha achicado las distancias entre los dirigentes y los afiliados, entre la conducción gremial y los trabajadores. Siempre ha estado activo y presente en los momentos de la movilización sectorial, convengamos que la crisis agropecuaria a los obreros de la industria lechera, pero también pusieron el cuerpo en los reclamos populares en general. Las grandes empresas lácteas y de dudoso comportamiento a la hora de defender integralmente el sector, han perseguido a un gremialismo alineado con las necesidades de los trabajadores. Así las cosas, el gremio de la industria láctea de la zona sur de la provincia de Santa Fe, plena cuenca lechera, quedó alineando con las posiciones de la Confederación de Trabajadores Argentinos, CTA, en histórica confrontación con la conducción nacional del gremio. Néstor Kirchner está abriendo varias cajas de Pandora, simultáneamente. Aunque no de forma inocente y por curiosidad como en el mito griego. La vieja querella que llevan adelante los dirigentes de la CTA para ser otra opción legal y reconocida en la atesorada experiencia gremial argentina, es una de las principales tormentas desatadas. La vieja CGT va a defender su tradicional espacio histórico, como es de esperar, y no tanto por ideología como por rentabilidad. Y la CTA está viendo su oportunidad histórica a partir del fallo de la Corte Suprema, inducido por Kirchner, que favorece notoriamente sus reclamos. Imaginemos la colisión constante que se va ha desatar en la Argentina, habiéndose producido este proceso y en plan provocación por parte del gobierno nacional. No sería el único conflicto buscado. Porque, en la lógica kirchnerista, el complicado escenario que se avecina para el próximo año electoral, amerita el desorden generalizado de todos contra todos. Pero sobre todo de pobres contra pobres. Mientras se peleen entre ellos, está todo bien. El gran tema que se aproxima a pasos agigantados y esperemos no eclosivamente, es el de la pobreza creciente y estructural. Para la mesa inteligente del poder político, es menester que se ponga distancia del núcleo central de los problemas políticos y económicos de la enrarecida realidad nacional. Inundar de conflictos para velar los sucesos principales.