¿SOBRE RUEDAS?

Daría la impresión, que a pesar de todo, Hugo Moyano tiene resto, aunque no todo es fácil ni gratis. Es probable que la C.G.T., continúe un periodo más bajo su conducción personal, través de algún hombre del riñón o en un pacto con Caló de la resurgida U.O.M.. A pesar de algunas desinteligencias o tironeos con la presidente y que haya retaceado ptotagonismo en los últimos actos, Huguito ha sido confiable a la hora de pactar con Kirchner, no sin costo, los límites de las paritarias y es una de las patas demorado y problemático “pacto social” del continuismo. El acuerdo de los primeros meses de 2008 ha quedado totalmente desdibujado en su pactada pretensión “antidesborde”. Con los opositores al camionero: Barrionuevo y los suyos, todos “Gordos”, Gerardo Martinez y Caló, Obras Sanitarias y U.P.C.N, no se sabe si vale la pena el esfuerzo de un relevo. Quizás hagan el cambio con una repromocionada UOM (Unión Obrera Metalúrgica), como para darle un cierto fundamento al discurso industrialista. Moyano amaga con nuevos reclamos salariales como presión al el matrimonio presidencial. Camioneros no era de los gremios más grandes, pero si con hambre. Moyano, en estos últinos años, ha hecho crecer su federación como nunca y tejió una férrea alianza con todos los gremios del transporte en la argentina. Maneja una de las mayores cajas sindicales de la actualidad. Por año recibe unos doscientos cincuenta millones de pesos, solamente en concepto de subsidios al gasoil. Participa de un entramado político que se fue diseñando con el advenimiento de Kirchner al poder. Sacando un poco de acá y otro poco de allá, fue construyendo una fenomenal maquinaria de presión. Todavía no la hemos visto desplegada en toda su magnitud y funcionar a pleno. Imaginémonos un paro generalizado de transporte de mercaderías, personas y dinero del transporte automotor, ferroviario y marítimo en todo el país. Eso se llama parálisis y lo hemos comprobado con los últimos bloqueos de rutas de los transportistas de cereales. Ha reflotado la Catt, Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte. Su personería había sido cancelada por el último gobierno militar y restituida por Kirchner a los gremios del sector a través del ministro Tomada. Todo lo que se transporta en la Argentina, absolutamente todo, está en conocimiento de Hugo Moyano y sus boys. Esta superficial y para nada completa enumeración o descripción del poderío de Moyano, esta muy presente en la mesa de situación de la inteligencia política que nos gobierna. Un carísimo campo en la llanura fértil de la provincia de Buenos Aires y una companía de seguros engrosan el dossier. Una serie de hechos, parecieran que abonan la teoría de una enconada y quizás sórdida pulseada con el gobierno. Parece que en plenas vacaciones de invierno se debelará la incógnita.