HANNAH ARENDT

En 1951, Hannah Arendt escribió: "El sujeto ideal de un régimen totalitario no es el nazi convencido o el comunista comprometido, son las personas para quienes la distinción entre los hechos y la ficción, lo verdadero y lo falso ha dejado de existir".

lunes, 18 de enero de 2016

NISMAN: JUEZA AHORA GIRA LA CAUSA A PISTA CRIMINAL.

Mauricio Macri ayer en su quinta “Los Abrojos”, junto a Iara
y Kala Nisman, el rabino Marcelo Polakoff, Juliana Awada y Antonia.

     Por Milton Merlo/Ámbito Financiero.- El destino de la causa por la muerte de Alberto Nisman se orientará los próximos meses hacia la pista de un supuesto homicidio. Es un gesto del Poder Judicial para con una necesidad que se ha planteado el Gobierno que es la de arrojar alguna certeza sobre el escándalo que marcó el tramo final del ciclo kirchnerista. Así como 2015 fue el año en el cual dominó, en instancia de tribunales, la tesis del suicidio primero y luego la de una posible instigación, 2016 depara postales más explosivas porque la trama de un supuesto crimen encierra responsabilidades de todo índole y a todo nivel. El oficialismo está convencido de que exhibiendo esas cuestiones construirá prestigio social, reforzará la política exterior y, lo que es más importante para el entorno presidencial, mostrará un plano escabroso que atribuirá a la gestión anterior. El termómetro del caso se movió apenas Mauricio Macri juró como presidente. La jueza Fabiana Palmaghini quien siempre fue renuente a aceptar la carga de la pesquisa terminó por desplazar a la fiscal Viviana Fein.
Para esto tuvo el apoyo del camarista Mario Filozoff que vendría a ser su mentor en la cotidianidad de la Justicia penal ordinaria y del fiscal general Ricardo Sáenz que es el superior de Fein y que aspira a reemplazar a Alejandra Gils Carbó con el apoyo del Gobierno. La pesquisa está delimitada entre las vinculaciones de la política, las hipótesis del caso y las querellas de los familiares de Nisman. Palmaghini tiene aval del oficialismo y de Sandra Arroyo Salgado para ir tras la pista del homicidio. Fein tuvo apoyo absoluto de Gils Carbó y trabó amistad con Sara Garfunkel, la madre del fiscal enfrentada a la exesposa por rudimentos del caso. La fiscal nunca se apartó de la senda del suicidio. Las ideas de Palmaghini están plasmadas en el paquete de medidas de prueba que requirió, pero sobre todo en dos focos: indagar a la custodia del fiscal y volver a mantener un encuentro con el espía Antonio "Jaime" Stiuso que esta vez no será en la soledad de una madrugada invernal, como ocurriera con Fein, sino con mayor flexibilidad. Al igual que Palmaghini, Fein también desconfió de la custodia. A ninguna de las dos funcionarias de larga experiencia les parece razonable que el fiscal más importante del país (por la denuncia formulada contra Cristina de Kirchner) pudiera desligarse de sus custodios con solo requerirlo.


 La jueza cree que podría existir algún tipo de infiltración entre los hombres dedicados a resguardar al fiscal. Tiempo atrás Fein le compartió dudas concretas a partir de ciertas inexactitudes en sus declaraciones. La aparición de Stiuso es el nivel superior de la historia. Palmaghini espera hablar con el exjefe de los espías y luego replicar esas conversaciones con otros directivos de la SIDE que despuntaron durante el kirchnerismo e incluso con funcionarios políticos. La jueza está convencida de que ese entorno ofrece más detalles que el mundo de amistades y familiares sobre el cual se volcó Fein y en que no encontró demasiado, salvo algunos detalles de la vida privada de Nisman que poco aportaron a delucidar el caso. Justamente ese entorno disparó el otro frente que interesa a los investigadores y sobre el cual se avanzará en los próximos días: la cuenta de Nisman en el banco Merryll Lynch de Nueva York. Entre los aportantes de esa cuenta aparece el financista desaparecido Damián Stefanini cuya ausencia, sorprendentemente, continúa investigando Arroyo Salgado, detalle sobre el cual Fein siempre protestó. Esa pesquisa está en punto muerto desde que los abogados defensores de la causa señalaran que Rodolfo Canicoba Corral había accedido a los registros bancarios de Nisman en Estados Unidos por fuera de reglamento. Luego la Cámara Federal les dio la razón. Cuando el juez apareció con esa pista José Luis Sbatella, que entonces reportaba en la UIF advirtió irregularidades en el trámite, pero esas advertencias no fueron correspondidas. La UIF por ahora no tiene conducción y Canicoba resiste fuertes presiones del macrismo para dejar su cargo y replegarse en la jubilación. Sobre ese mundo de cuevas financieras, espías y funcionarios es sobre el cual busca moverse Palmaghini. Será decisivo hasta qué punto Stiuso actúa como guía en esa travesía escabrosa. 

En el juzgado donde descansa la causa domina la idea de que el fiscal y el espía pertenecían a una matriz similar con intensas ramificaciones en el exterior y que cuestionaba el acercamiento con Teherán. La incertidumbre sobre esa noción siempre provendrá de lo relatado por Cristina de Kirchner, sobre un asesor de seguridad nuclear de la Casa Blanca que favoreció la cercanía con Irán. Esa expectativa sobre lo que dirá Stiuso es otro rasgo del cambio de Gobierno: el kirchnerismo hostigó al espía y le armó un campo minado en el fuero federal como estrategia para neutralizarlo en caso de que éste reapareciera contando sus anécdotas de tantos años al servicio del poder político. El PRO en cambio desea que éste cuente todas sus verdades para contribuir al desprestigio de la gestión anterior. Más allá de los avances del caso, el Gobierno tiene a su cargo un manejo político que tercerizará en una oficina especial a cargo del radical Mario Cimadevilla. Al igual que ocurre con las cuestiones referidas al agro a cargo de Ricardo Buryaile, u Oscar Aguad con la política de telecomunicaciones, a Cimadevilla le toca el revisionismo más áspero de la década kirchnerista, tanto por las cuestiones conocidas como por las que Palmaghini descubrirá en los próximos meses.

Entradas populares

ARCHIVO DEL BLOG