Por Patricia Valli/Perfil.-
El Gobierno reintegrará impuestos, destrabará importaciones y buscará nuevos mercados. Apuran la suba del mínimo de Ganancias.
La baja actividad del primer trimestre –con caídas del consumo del 2%, del 6% de la industria y la construcción en marzo y del 16% en exportaciones– preocupa al Gobierno, que retomó una serie de anuncios para tratar de descongelar el consumo, la producción y evitar una caída del empleo.
Con cambios en Ganancias más créditos blandos y estímulos fiscales con distintas formas, el Poder Ejecutivo intentará salir del congelamiento y crecer, por lo menos, entre 1 y 1,5% este año según estiman dentro del Palacio de Hacienda que dirige Axel Kicillof, aunque economistas privados prevén un escenario más complicado (ver aparte).
Todo depende, reconocen en el Gobierno, de cómo se reacomoden los precios durante el primer semestre y de que se sostenga la paz cambiaria, misión a cargo del titular del Central, Juan Carlos Fábrega. El clima de “fin de ciclo”, en tanto, frena las decisiones de inversión que dependen de la “restauración de la confianza”, según sostienen los privados. Y si bien Kicillof sostiene que el segundo semestre será mejor, el plan “no frost” está en marcha:
◆ Poder adquistivo. El Gobierno adelantaría una suba del piso sobre el que se paga Ganancias, que, según señaló a radio Latina el titular de la CTA oficialista, Hugo Yasky, “se tendría que anunciar de aquí a 15 días”. Así, con aumentos salariales que se cierran en 30%, el nuevo piso debería pasar de los $ 15 mil brutos de ingresos actuales a los $ 19 mil. La mejora en Ganancias podría aplacar reclamos en puerta, como la marcha convocada por Hugo Moyano, de la CGT opositora, para el 14 de este mes, y bajar la pauta de las paritarias.
◆ Planes sociales. El segmento de mayor propensión al consumo es el que percibe la AUH, hoy en $ 460, para quienes, después de la devaluación del 21% en enero, se reconoce en el oficialismo que hace falta una recomposición. “Las políticas económicas siguen apuntando a sostener el consumo, redireccionando el gasto. El retiro de subsidios va en esa dirección”, aseguró el economista de la Gran Makro, Agustín D’Attellis. “El sector al que se retiran los subsidios tiene capacidad de ahorro. En cambio, quien percibe una AUH, cada peso extra que percibe lo va a volcar a consumo”, dice. El aumento, en los papeles, depende de cómo se reasignen los subsidios que se recortaron al agua y gas, pero el Gobierno podría adelantar la suba.
◆ Financiamiento. Para la industria, en el Palacio de Hacienda y el Central se analizan más créditos blandos como los que anticipó PERFIL la semana pasada y anunció el lunes la presidenta Cristina Fernández. En el caso del sector automotor, se debate una marcha atrás con el impuesto interno a los autos de alta gama, en el marco de una caída del 35% de las ventas internas de los 0 km y suspensiones y vacaciones adelantadas en la industria automotriz.
◆ Comercio exterior. Fuentes del sector automotriz aseguraron que la estrategia radica en retomar la producción y la exportación. Para esto, en la última reunión con el sector, funcionarios del Gobierno aseguraron que se acerca un acuerdo de desgravación de aranceles con Colombia para ampliar los destinos de exportación y evitar la brasildependencia.
◆ Incentivos fiscales. Otra de las medidas en estudio, que forma parte de los reclamos de larga data de los empresarios, es la baja de retenciones a las exportaciones industriales, del 5%, en línea con lo anunciado para el trigo.
◆ Importaciones. En el marco de los acuerdos por cadenas de valor, Cristina prometió también acelerar la aprobación de importaciones para que no falten insumos para la industria. Según indicaron algunas empresas, esto ya se está notando, al menos en las que le compran a Brasil.
◆ Obra pública. Para sostener la construcción, se espera la reactivación de la obra pública postergada, que implicaría unos $ 80 mil millones para este año
