Por Urgente24.-
En medio de los cortes de luz –que siguen sufriendo miles de usuarios aún hoy- el 06/01 Hebe de Bonafini criticó a quienes protestaban porque “se les pudren las cosas en la heladera” debido a los cortes de energía eléctrica porque “tienen el freezer lleno y hay gente que todavía no puede comer, entonces los que tenemos no nos quejemos tanto”.
Un ex empleado de la Fundación Madres de Plaza de Mayo reveló que durante 8 años Hebe no pagó por el servicio: “desde el 2005 hasta el año en que estuve, jamás le pagamos un centavo a Edesur”. Además, un electricista habría hecho una conexión con un consorcio lindante para que la Fundación pueda “colgarse de los postes de luz”.
El lunes (06/01) la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, generó una gran polémica con sus declaraciones contra los vecinos de la Capital Federal y el Conurbano que siguen sin luz después de varios y días y comenzaron a protestar con cortes de calles y otras manifestaciones.
En este sentido, afirmó que le “da vergüenza” quejarse por la falta de luz y pidió a quienes “se le pudren las cosas en la heladera” que no protesten porque “hay miles de personas que no tienen ni aire”.
Y reclamó: “Me parece que cada argentino que se queja porque se le pudren las cosas de la heladera es porque tienen el freezer lleno y hay gente que todavía no puede comer, entonces los que tenemos no nos quejemos tanto”.
Hebe hizo estas declaraciones en un reportaje al diario oficialista Tiempo Argentino. Allí, la dirigente del movimiento por los derechos humanos agregó: “Yo me estoy peleando con todos los que me dicen todo lo que tuvieron que tirar de la heladera por los cortes, y yo les digo, ‘sabés la gente que no puede comprar ni medio kilo de carne picada’”. Y añadió: “Ese tipo de cosas hay que hablarlas y repetirlas; es cierto, es jodido no tener luz, es jodido no tener agua, pero pensemos cuántos hay que no lo tienen nunca”.
Este miércoles (08/01) el diario Perfil da cuenta del testimonio de un ex empleado de la Fundación que reveló que Madres no pagó la factura de luz durante 8 años a pesar del alto consumo que demandaban las oficinas de Sueños Compartidos, la planta principal, dos pisos, la Universidad, el bar, la biblioteca, la librería y la calesita para los chicos ubicada en la Plaza del Congreso.
La versión del empleado fue corroborada por dos importantes directivos de la Fundación y un funcionario nacional.
“Nunca pagamos la luz”, dijo el exempleado que no reveló su identidad y que fue despedido a comienzos de 2011. El hombre que se desempeñaba en el departamento de Compras de la institución ignora si la irregular situación continúa actualmente. “Desde el 2005 hasta el año en que estuve, jamás le pagamos un centavo a Edesur” explicó.
“El mayor gasto de energía lo generaba la calesita”, precisó.
Según Luis Gasulla (autor de la nota de Perfil y quien conoce bien la historia de los organismos de DD.HH lo que reflejó en el libro El negocio de los Derechos Humanos), mediante la gestión de Bonafini con el gobierno nacional, la gestión que realizó Sergio Gandolfo, ex director de la Fundación durante un breve período tras la salida de Sergio Schoklender, fue convencer al consorcio del edificio lindante para que un electricista especializado realizase la operación para “colgarse de los postes de luz”.
“Llamen al uruguayo” fue la orden que reprodujo la fuente reservada, según señala, dada por la propia Bonafini. El uruguayo era Juan de los Santos, un hombre con conocimientos técnicos y experiencia en la materia gracias a sus contactos en Edesur.
