EL BANCO CENTRAL ARGENTINO SIGUE SACRIFICANDO RESERVAS PARA FRENAR EL DÓLAR
Ayer la divisa se mantuvo en $ 4,26 al público. El Banco Central tuvo que vender más de 100 millones de dólares para mantenerlo. Economistas aseguran que la situación es insostenible.
Contener una disparada en el precio del dólar parece cada vez más complicado para el Gobierno nacional. Se está convirtiendo en una bola de nieve imposible de parar con la venta de reservas del Banco Central o con las medidas restrictivas para desalentar la fuga de capitales o la compra de divisa extranjera de parte de los ahorristas, que terminan generando mayor demanda.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) sacrificó ayer más de 100 millones de dólares de sus reservas internacionales para evitar una escalada de la divisa estadounidense, con lo que sumó ventas por unos 750 millones en la semana y por más de dos mil
millones en lo que va de octubre, según estimaron operadores financieros. ¿Hasta cuándo podrá sostener esa política cambiaria?
“La venta de reservas del BCRA entre 150 y 200 millones de dólares diarios, compensar la pérdida de reservas endeudándose o impidiendo de manera cavernícola la venta de dólares es algo que no se puede hacer de forma indefinida en el tiempo”, dijo a Hoy el economista José Luis Espert. “No se puede hacer crecer el gasto público en un 35% anual indefinidamente, como creyó el Gobierno en 2003, porque los problemas llegan y ahora ya llegaron”, agregó Espert.
El dólar mayorista quedó ayer plano a $ 4,236, un avance marginal de una milésima en la semana, mientras se pactó sin cambios a $ 4,26 al público y subió ocho centavos desde el último viernes para las operaciones de “contado con liquidación” hasta $ 4,88.
La entidad monetaria que preside Mercedes Marcó del Pont asegura que las ventas de ayer fueron de 110 millones de dólares, aunque para los operadores financieros superó los 140 millones de dólares. Además, el Banco Central aprobó el jueves dos normativas: una que incorpora la venta de activos y empresas de residentes locales a extranjeros, y la otra que profundiza las regulaciones existentes y procura desarticular las operaciones bursátiles especulativas con el llamado “contado con liquidación”.
Para el economista Aldo Abram, “cuando se ponen límites máximos para comprar dólares se genera la sensación de temor de que en cualquier momento te puede tocar a vos la prohibición”. En ese sentido, el director ejecutivo de la Fundación Libertad y Progreso aseguró a Hoy que las medidas que está tomando el Gobierno nacional “son los primeros pasos que han dado los gobiernos que han terminado con problemas cambiarios graves”.
El Central justifica su decisión
El vicepresidente del Banco Central, Miguel Pesce, sostuvo ayer que “lo que se ha impuesto son nuevos controles para evitar ciertos abusos” en el mercado cambiario argentino, al justificar las medidas para combatir la creciente dolarización y la fuga de divisas.
Pesce precisó que “se detectaban operaciones que tenían que ver con personas haciendo rollovers (renegociaciones) de la cantidad de pesos que tenían, que podían acceder hasta 2 millones de dólares en el mercado único y libre de cambios” y que “lo que ha hecho el Banco Central ahora es impedir esas maniobras”.
El vicepresidente del Banco Central además garantizó que quien compre dólares está “haciendo un mal negocio” y comparó con “la rentabilidad que pudo obtener cualquiera en el mercado de cambios, o un plazo fijo en un banco”.
Desde el lunes, AFIP controlará la compra de dólares
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) convalidará a partir del lunes que las personas o empresas que adquieran divisas en el mercado cambiario tengan los fondos correspondientes para hacerlo, y así terminar con el mercado en negro, anunció anoche el ministro de Economía, Amado Boudou.
“Hemos detectado más de un centenar de CUIT y CUIL cuyos ingresos no se condicen con los dólares que quieren comprar. Por eso, desde el lunes, el que compre divisas extranjeras será automáticamente auditado por la AFIP, la que avalará la compra”, dijo Boudou anoche en la sede del Palacio de Hacienda.
“Esto no modifica los montos. Sólo verifica que la empresa o la persona tenga los fondos para hacer la compra. Lo que buscamos es que todas las operaciones se canalicen a través del mercado formal”, dijo el ministro.
Boudou explicó que la medida se pondrá en vigencia el lunes a través de la resolución conjunta 3.210 del Ministerio de Economía y de la AFIP, que será publicada en el Boletín Oficial.
Aseguró que “la operación será muy sencilla”, ya que la empresa o persona que vaya a un banco a comprar divisas le dirá al cajero su CUIT o CUIL, y éste de inmediato, a través de la red informática del banco, consultará con la AFIP.
La AFIP, por su parte, le responderá al banco si el interesado -en base a su rango de ingreso y declaración impositiva- si está en condiciones de adquirir dólares u otro tipo de divisa.
Incertidumbre por las medidas
Las medidas que viene tomando el Gobierno nacional para frenar la escalada en la dolarización de la economía de la fuga de capitales son fuertemente criticadas por varios economistas porque generan mayor temor y provocan el efecto inverso al deseado.
A las medidas tomadas por el BCRA para desalentar la compra de dólares, se sumaron otras dos que el Gobierno de Cristina Fernández tomó el miércoles y el jueves para aumentar en unos 6.000 millones de dólares la oferta de divisas: la liquidación de 100% de las divisas por exportaciones para petroleras y mineras, y la repatriación de fondos para compañías aseguradoras.
“El origen del problema que ha incentivado la fuga de capitales, y por lo tanto la presión cambiaria, ha sido la incertidumbre por la situación europea sumada a factores nacionales como una suba del dólar más acelerada de lo usual, que permitió el BCRA en agosto y la incertidumbre que generan siempre las elecciones”, explicó a Hoy el economista Aldo Abram. “El problema es que se sabía el resultado de las elecciones, pero no cuál va a ser la política cambiaria que tendrá de ahora en más el Gobierno, y con estas medidas se genera más temor”, continuó.
“Hay que atacar las causas porque la política del Gobierno de avanzar sobre cualquier caja, como las jubilaciones, para sostener el gasto público se percibe como insostenible”, consideró José Luis Espert. Según Abram, “la decisión de obligar a las empresas de seguros a traer las divisas que tienen en el exterior genera temor a que sean nuevas cajas a expropiar” de parte del Gobierno nacional.
Preocupa la fuga de capitales
La nueva normativa del Banco Central procura combatir la fuga de capitales que se profundizó en los últimos meses y alcanzó por encima de los 20.000 millones de dólares a octubre, por arriba de las remesas de 2009 o 2010 y cerca del récord de 2008.
La sostenida dolarización de carteras ha erosionado las reservas internacionales de la autoridad monetaria, que cayeron el jueves a 47.622 millones, una merma de unos 970 millones desde el 30 de septiembre.
El volumen operado quedó ayer en 480,8 millones de dólares en el mercado de contado (spot) y a 296 millones en el de futuros, al cierre de la actividad de los mercados.
Presentan proyecto antilavado
El titular de la Comisión Nacional de Valores (CNV), Alejandro Vanoli, destacó ayer el “beneplácito” con que la reunión del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) recibió el proyecto de ley que apunta a reforzar penas en el combate contra los delitos económicos, como la manipulación de mercados.
Vanoli, quien acompañó al ministro de Justicia, Julio Alak, en el encuentro plenario del organismo intergubernamental celebrado en París, dijo que “no hubo objeciones en esta materia y se destacó que la Argentina está alineándose con los altos estándares de control de los países desarrollados”.
Los participantes en la reunión, agregó el funcionario, valoraron esta política “justo en momentos en que no pasa semana en que no se descubran actitudes fraudulentas o se encarcelen responsables de maniobras financieras en Europa y en Estados Unidos”. El titular de la CNV remarcó que fue “muy bien recibida” la decisión de “crear un órgano de monitoreo y control”.
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