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| Gerardo Martínez con Cristina Kirchner |
GERARDO MARTÍNEZ ES EL CANDIDATO DE CRISTINA Y LOS EMPRESARIOS.
El establishment ya lo ungió como sucesor de Moyano. Creen que representa un sindicalismo distinto, menos conflictivo. Además, es cauto para negociar salarios. Gerardo Martínez es el candidato de Cristina Kirchner para la CGT.
Moderación, racionalidad, equilibrio, vocación de diálogo. Si reúne estas características, será aceptado por el establishment. La sucesión de Hugo Moyano al frente de la CGT –que debería ocurrir en julio del año próximo, pero podría adelantarse– ya comenzó a ser discutida entre los principales referentes de la entidad y también entre los empresarios, que cuestionan el modelo instaurado por el líder camionero e impulsan un cambio en la línea de conducción. En este sentido, el favorito es el titular del gremio de la construcción, Gerardo Martínez, a quien consideran una persona sensata, con sentido común y, al mismo tiempo, capacidad de conducción.
El presidente de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) también cuenta con la venia de la presidenta Cristina Fernández, quien considera que Moyano ganó demasiado poder en los últimos años y se volvió incontrolable.
A ello se suman los problemas judiciales que afronta el dirigente, vinculados especialmente a la denominada “mafia de los medicamentos”. Martínez, en cambio, revirtió su perfil crítico hacia el Gobierno en los últimos meses y tiene una actitud más conciliadora y de diálogo. No sólo frente a las autoridades sino también con el empresariado. Según manifestó un dirigente del sector bancario, “representa un modelo de sindicalismo parecido al americano, donde existe una asociación entre los intereses del gremio y los de las empresas. Martínez –agregó– definió una forma de sindicalismo distinta de la característica de reivindicación peronista”. No son muchos los candidatos que reúnen las condiciones para suceder a Moyano, y si bien existen otros nombres que podrían ser avalados por el empresariado, todos apuestan al titular de la UOCRA. Otro de los nombres que suenan y que también tiene aceptación de las cámaras es Andrés Rodríguez, de UPCN, pero al mismo tiempo genera dudas por representar a los trabajadores estatales. Existen otros referentes sindicales con perfil moderado, como por ejemplo Antonio Caló, pero en el empresariado admiten que “no reúne suficiente poder” como para conducir la CGT. De igual manera, tampoco tienen chances referentes de gremios menores. En definitiva, Martínez es el que suma los mayores puntos, más allá de que “se lo ve muy entusiasmado con su rol en la Organización Internacional del Trabajo (OIT) –fue reelecto como miembro del consejo de administración por tres años más– y pareciera no tener intenciones de asumir en la CGT”, dijo una fuente de la Cámara de la Construcción. Sin embargo, el directivo también admitió que se lo ve muy cerca de Cristina y que si “la Presidenta se lo pide, es difícil que se niegue”. Directivos de la UIA mantuvieron reuniones con dirigentes sindicales en los últimos días para conocer los entretelones de la negociación y consideran que la sucesión de Moyano debe definirse en el marco de un consenso con el camionero, ya que “a nadie le conviene tenerlo afuera de la CGT”, precisaron en la central industrial.Para la institución que preside José Ignacio de Mendiguren, quien lo suceda debe ser “moderado y con capacidad de conducción”. En referencia a Martínez, desde la Cámara de Comercio enfatizaron que “es una persona aceptada por todos, tiene buen diálogo con todos los sectores y es un negociador”. “Además, está cerca del Gobierno”, enfatizaron. A diferencia de la UIA, en la CAC manifestaron que no lo ven a Moyano acordando su salida. La forma en que Martínez negocia, por ejemplo, los aumentos salariales es un factor que estimula mucho a los empresarios. Si bien las discusiones no son sencillas, admiten en la cámara que lidera Carlos Wagner que “tiene sentido común”. Para este año, el sector cerró en 24% más algunos puntos no remunerativos, una cifra razonable en relación con la inflación y con los reclamos de otros gremios.
