Lo anunció el ministro de Salud, Juan Manzur; la fabricación a nivel mundial había sido discontinuada; en el país hay un millón y medio de infectados
El ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, anunció hoy la producción nacional de un medicamento para tratar la enfermedad de Chagas cuya fabricación a nivel mundial había sido discontinuada por un laboratorio multinacional.
Se trata del benznidazol, utilizado por quienes padecen este mal. En la Argentina se calcula que un millón y medio de habitantes están infectados y los afectados por cardiopatías de origen chagásico son más de 300.000, según datos del Ministerio.
"El benznidazol lo producía una multinacional que lo había discontinuado porque no era negocio producir medicamentos para los pobres", dijo Manzur en la Academia Nacional de Medicina. Ahora el producto será elaborado en el país a partir de un emprendimiento público y privado, integrado por un consorcio que reúne al Ministerio de Salud, los laboratorios ELEA y Maprimed y a Mundo Sano.
El medicamento estará disponible para quienes lo necesiten a través de la provisión pública de medicamentos que lleva adelante la cartera sanitaria nacional.
El medicamento estará disponible para quienes lo necesiten a través de la provisión pública de medicamentos que lleva adelante la cartera sanitaria nacional.
"Es un día histórico para la salud pública en la Argentina, porque después de 60 años de enormes esfuerzos en la lucha contra el Chagas, tengo el orgullo de decir que el país comenzó a producir el tratamiento para esa enfermedad", agregó el ministro. "Cuando asumimos la gestión analizamos de qué manera era posible colocar a una enfermedad de las llamadas desatendidas en la agenda sanitaria, e inmediatamente conseguimos un decreto de la Presidenta por el que se creó la Dirección de Enfermedades de Transmisión Vectorial y la consecuente asignación de recursos", recordó el ministro. Según contó Manzur, en los dos últimos años se invirtieron más de 140 millones de pesos en las acciones de prevención y control del Chagas.
LA NACION