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"¡POLLO CON TODO!"
Excarcelaron a Sobrero y aseguró que su detención "fue una cama bien clara"
El delegado ferroviario Rubén "Pollo" Sobrero recibió la excarcelación tras más de cuatro días de arresto, luego de que la Fiscalía advirtiera sobre la "endeblez probatoria en la causa" por la quema de vagones de la Línea Sarmiento del 2 de mayo pasado. Rodeado por sus compañeros de la Lista Bordó en la puerta de la Superintendencia de Investigaciones Federales, Sobrero agradeció "las muestras de solidaridad" de los últimos días y vinculó directamente con la detención al jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, a quien pidió que lo deje de "perseguir".
"Me preocupa mucho que algunos funcionarios conozcan la causa antes que mis abogados. Esto fue una cama bien clara. Aníbal Fernández hace tres años que me quiere meter preso y no puede. Le pido por favor que deje de perseguirme", afirmó el dirigente sindical al quedar en libertad, cerca de las 21.30.Junto a Sobrero, líder de la oposición a la conducción de la Unión Ferroviaria, el juez federal de San Martín Juan Manuel Yalj decidió liberar a otros tres detenidos en el marco de la investigación: Leonardo Portorreal, Rodrigo Peláez y Hernán Akson.
Todos ellos habían sido detenidos el viernes por la madrugada acusados de los delitos de "asociación ilícita" y "estrago doloso" y ahora el magistrado cuenta con diez días para resolver si los procesa o les dicta la falta de mérito.
Fuentes judiciales informaron que el magistrado coincidió con el dictamen del fiscal federal Jorge Sica y decidió excarcelar a Sobrero bajo caución juratoria, con la prohibición de salir del país y la obligación de presentarse una vez por mes en el juzgado y de comunicar si se ausenta de su domicilio por más de 48 horas.
La Fiscalía había dictaminado a favor de la libertad del sindicalista ferroviario, quien consideró que no se fugará ni entorpecerá la investigación, y advertido acerca de la "endeblez probatoria en la causa", informaron fuentes judiciales.
"Si hubiese tenido fundamento serio para negar excarcelación lo hubiese hecho, no lo tengo", reconoció ante la prensa el magistrado, quien en cambio rechazó el pedido de liberar a los hermanos Guillermo y Fernando Díaz -presuntos barrabravas de All Boys- por no tener domicilio (vivirían en una plaza).
A pesar de haber reconocido "errores" en la investigación, que atribuyó a la Policía Federal, el juez ratificó que el incendio de las formaciones ferroviarias fue un "sabotaje" y no "una mera protesta" e insistió en la "hipótesis en cuanto a que hay un apriete salvaje por medio del sindicalismo de Sobrero".
"Lo tenemos bastante probado y posiblemente si seguimos avanzando en esta línea lo van a ver con fundamento", sostuvo el juez y ejemplificó que hubo "el cambio de un cable de alta tensión por otro de baja para que se pare una formación", lo que "no es prueba de una casualidad".
Sin embargo, la liberación se produjo luego de que Sobrero fuera indagado por el juez, audiencia en la que responsabilizó a la empresa concesionaria por el descarrilamiento de los trenes.
Negó que esa falla, que generó las demoras y los desmanes posteriores, fueran un acto de vandalismo sino que se produjo "por una fatiga de los materiales".
En esta acusa están presos, procesados con prisión preventiva confirmada por la Cámara Federal de San Martín Alan Skrobacki y Víctor Martínez, quienes enfrentan cargos por asociación ilícita y estrago doloso, por su presunta participación en los incidentes.
A Sobrero el juez lo consideró jefe de esa asociación ilícita y agregó la acusación de "extorsión", pues entendió que su agrupación presionaba a la empresa TBA mediante la realización de desmanes, para obligarlos a contratar a trabajadores tercerizados.
No obstante, Yalj reconoció que con la indagatoria la acusación "se diluyó un poco", ya que se basan en indicios aportados por Skrobacki, el joven procesado que dijo haber sido contactado por "Leo" para incendiar los vagones y que le pagaron por hacerlo.
Además, complicaba a Sobrero la declaración de un policía que supuestamente señaló que Skrobacki le confió que le habían pagado para quemar los trenes, aunque el uniformado recién declaró esto ahora y no en junio, cuando ocurrieron los hechos.
"El testimonio que había contra Sobrero por parte de (Alan) Skrobacki se diluye un poco porque el dato que había contra Portorreal, según las indagatorias de ayer, no sería tan firme", aseguró el magistrado.
La detención de Sobrero sacudió el escenario político luego de que varios sectores del sindicalismo, incluso la CGT de Hugo Moyano, salieran a pedir la liberación y vincularan al Gobierno con la maniobra judicial.
Incluso, los ferroviarios habían programado medidas de fuerza en caso de que Sobrero no recuperase la libertad, aunque las manifestaciones finalmente se trasladaron a las puertas del lugar de detención, en Superintendencia de Investigaciones Federales ubicada en Madariaga y General Paz.
