PICARDÍAS MENEMISTAS

Con el otorgamiento de esta asignación parcial para niños y adolescentes de 180$ por cada hijo, se verifican unos reflejos rápidos por parte de Néstor y Cristina para una oposición lenta. El gobierno una vez más se apropia pícaramente del discurso surgido de muchos actores interesados en socavar el poder oficial, pero también de una realidad feroz que tiene a los más débiles postergados sin destino. La Iglesia Católica Argentina, partidos de la oposición y muchos sectores sociales y gremiales , todo ellos en contacto cotidiano con esta verdadera tragedia, fueron diseñando propuestas que contemplaran no sólo atender de manera urgente esta fractura, sino como financiarla. El tema estaba adquiriendo mucha masa crítica porque se inscribía en el marco del propio reclamo del gobierno nacional de hacer más que criticar. Y además candente miseria social y económica de millones de argentinos, salta a la vista. De todas maneras se debería tomar como todo un éxito que el gobierno, quizás sin alternativa, haya optado por esta vía. Si es que verdaderamente ocurre. Es una medida parcial e incompleta y su financiamiento es horrible. Hace bastante que los Kirchner vienen sustituyendo partidas y reemplazando destinatarios. Ahora ya se están desvistiendo a unos santos muy empobrecidos, para vestir a otros en circunstancias parecidas. Nada de crear riqueza, es decir trabajo, verdadera fuente de justicia y dignidad. Que pequeños sectores, empresarios nuevos o viejos, se enriquezcan ilimitadamente por las simpatías oficiales no significa que el producto bruto interno refleje una mejor distribución de la riqueza. La medida anunciada, esperemos que no corra la suerte de muchas otras nunca concretadas, tiene más la pinta de una competencia irracional con una sociedad que pareciera que está empezando a cogobernar. Nunca va ser reconocido públicamente por el matrimonio presidencial, pero la gente va a llenar el vacío de conducción. El gobierno está tratando de arrebatarle a la sociedad argentina la “agenda social” de la peor y amenazante manera.