SE LES SALIÓ LA CADENA Y LLEGÓ LA TELEVISIÓN

Todo un plan político…bah, mediático. Se viene la televisión kirchnerista. Tardía pretensión de un gobierno que alucina con contrarestar la falta de políticas de efectividades conducentes al bien común, mediante “fútbol baratito para todos y a toda hora” y también con la tinelización de la escasa gestión seria que se tramita en la Casa Rosada. Quizás el viaje de Cristina a Venezuela no sea sólo para vender carne y leche, y si consista en una mera incursión por un “canje”, como se dice en la jerga de los medios. A lo mejor regrese con unos imprescindibles dólares bolivarianos a cambio de pasar por CANAL K, insistentemente Telesur con el universo Chavez en todo su esplendor y alguno que otro culebrón venezolano. La operación de medios también forma parte del estilo de no parar la pelota. Distraer y de paso, si cabe, hacer negocios que además, parezcan que favorecen el gusto popular. Inminencia de un período de mucha simpatía kirchnerista. Como de pan ni hablar, meta circo nomás.