Por Diario HOY.-
El expresidente firmó un decreto en 1997, cuando era gobernador de Santa Cruz, para gambetear el impuesto a las Ganancias. La noticia vació de contenido el discurso enunciado por Cristina en la última cadena nacional. La presidenta Cristina Kirchner defendió anteayer el impuesto a las Ganancias en un acto en La Matanza. A través de cadena nacional atacó a los sindicalistas que promueven dejar de pagar este tributo, a los que calificó de “poco solidarios”.
El Estado Nacional recauda casi 50.000 millones de pesos por año con ese impuesto, que tributan cerca de un millón de trabajadores que ganan más de 15 mil pesos por mes. Cristina maltrató a los que quieren que se suba el mínimo no imponible. Jugó con la conciencia.
El Estado Nacional recauda casi 50.000 millones de pesos por año con ese impuesto, que tributan cerca de un millón de trabajadores que ganan más de 15 mil pesos por mes. Cristina maltrató a los que quieren que se suba el mínimo no imponible. Jugó con la conciencia.
Para contrarrestar el efecto mediático del paro del martes pasado, la Presidenta anunció obras hidráulicas y de redes de cloacas realizadas en el conurbano. Explicó que sin Ganancias, la gente de bajos recursos se queda sin servicios elementales.
“Como decía Evita, le tengo más miedo al frío de los corazones de los compañeros que se olvidan de dónde vinieron que al de los oligarcas”, exclamó ante unas 4000 personas en su discurso más duro contra los sindicatos. “Me duele que los que tienen un trabajo bien remunerado hagan un paro porque tienen que ceder un poco de su sueldo”, dijo en otro de los tramos de su alocución.
En el discurso todo bien, pero el castillo de naipes se derrumbó. Es que ayer se recordó que su exesposo, Néstor Kirchner, firmó el Decreto 934 en 1997 cuando era gobernador de Santa Cruz, a través del cual dispuso que no se consideren integrantes de la base imponible del impuesto a las Ganancias a “los agentes dependientes de la Administración Central, Organismos Descentralizados y Autárquico y Entes Especiales de la Provincia”.
El abogado Juan Pablo Ruiz, autor del libro “El salario no es ganancia”, tildó de “barbaridad” el decreto y dijo: “Es muy fácil pedirle sacrificio a otra persona como a un trabajador mientras uno no lo hace. Sobre todo cuando uno no predica con el ejemplo”.
“Néstor Kirchner firmó un decreto que lo habilitaba a no pagar Ganancias sobre la totalidad de su dieta como gobernador, como quien dice, firmó una ley a su medida para evadir impuestos”, sostuvo Ruiz.
Según el letrado, el decreto está vigente en Santa Cruz por lo que “los funcionarios no pagan allí Ganancias”.
El decreto firmado por Néstor benefició al entonces ministro de Economía de Santa Cruz, Julio De Vido y a otros funcionarios como Ricardo Jaime. Pobre Cristina, ella se debe sentir triste por la actitud egoísta de su exmarido. O quizá sabía de la gambeta y se hizo la osa.
