Por Carlos Galván/Clarín.-
Habrá reuniones de las CGT de Moyano y Barrionuevo. Y también de los gremios del transporte y los bancarios.
La decisión de la administración K de no exceptuar Ganancias del aguinaldo y las declaraciones de Jorge Capitanich y Axel Kicillof parecen haber acabado con la prudencia política de Hugo Moyano. “Hay mucha bronca, sentimos que nos toman por tontos y esto molesta mucho. Todo el movimiento obrero ha tratado de soportar un montón de cosas, pero estas expresiones de los funcionarios son inaceptables. No es solo que te sacan la plata y te estafan sino que te toman por tonto”, dijo anoche a Clarín el líder camionero.
Su enojo dejaría la simple retórica y lo demostraría en los hechos.
Moyano convocó para hoy a la tarde a una reunión de Consejo Directivo de la CGT opositora en la que se aprobaría la realización de una medida de fuerza en lo inmediato. Es más: según versiones, se convocaría a un paro general de 24 horas contra el Gobierno para el miércoles 10 o el jueves 11. Al parecer a algunos los entusiasma más el 10 porque es una fecha simbólica: es el Día Internacional de los Derechos Humanos.
De acuerdo con la CGT Azul y Blanca de Luis Barrionuevo y la CTA Autónoma de Pablo Micheli, sus líderes ya acordaron con el camionero la realización de un paro la semana que viene. “Una huelga es la respuesta más contundente que tenemos en estos momentos de falta de respeto a los reclamos legítimos de los trabajadores”, fundamentó Micheli.
Pero Moyano rechazó anoche haber consensuado una medida de fuerza con las otras dos centrales sindicales opositoras: “Yo no le adelanté nada a nadie. Las decisiones se toman en conjunto y no queremos imponerle nada a nadie. Esperemos el momento. Por ahí no se resuelve nada mañana (por hoy). Esperemos el momento”.
Hoy a media mañana, antes de la reunión de la conducción cegetista, habrá un encuentro de los 22 gremios del transporte que realizaron una protesta conjunta por Ganancias la semana pasada. A esa reunión, Camioneros llevaría la moción de ir a un paro.
Pero es difícil que haya consenso. En dos gremios estratégicos, la UTA y La Fraternidad, se mostraban contrarios ayer a hacer una huelga. “Yo no lo veo probable”, anticipó el maquinista Omar Maturano. El colectivero Roberto Fernández completó: “Antes de definir un paro debemos lograr la unidad del movimiento obrero. A nosotros no nos lleva nadie de la nariz”.
Así, asomaba anoche como probable que algunos sindicatos del transporte no se sumen a un paro. Si, en cambio, lo harían los bancarios, que llamaron a una conferencia de prensa para esta tarde.
Moyano dijo que esperó hasta ahora para decidir una medida porque tenía señales de parte de sindicalistas oficialistas de que se exceptuaría Ganancias del aguinaldo. Cerca del jefe cegetista desafiaron: “Hay gremios que no tienen las pelotas para tomar la decisión que se tiene que tomar, pero a los camioneros nos sobran”.
