Ciudad del Vaticano-AICA.- Por primera vez en su pontificado, el Santo Padre pronunció un discurso en alemán, y lo hizo ante unos 50.000 jóvenes monaguillos que llegaron a Roma en peregrinación. El Papa exhortó a estos jóvenes a imitar el ejemplo de María, que fue totalmente libre y sumisa a la voluntad de Dios en su vida, e hizo el bien sirviendo a Dios y a los hombres. Cerca de 50.000 monaguillos de habla alemana se encontraron en la Plaza de San Pedro con el papa Francisco, a quien acompañaron en el rezo de las vísperas mientras se encuentran en Roma con motivo de su peregrinación anual.
El pontífice argentino compartió un espectáculo musical, rezó y les dirigió un mensaje en alemán, luego de escuchar las inquietudes de cuatro jóvenes participantes. Por primera vez en su pontificado, el Santo Padre pronunció un discurso en alemán, recordando tal lo aprendido durante su estancia en Alemania, en 1986, a donde llegó para culminar su tesis doctoral. El auditorio estaba compuesto por jóvenes de 26 diócesis alemanas y de comunidades de Austria y Suiza, a quienes exhortó a imitar el ejemplo de María, que fue totalmente libre y sumisa a la voluntad de Dios en su vida, e hizo el bien sirviendo a Dios y a los hombres.
El Papa centró su reflexión vespertina en un pasaje de la epístola de san Pablo a los gálatas. Sostuvo que las palabras del apóstol de los gentiles "llaman nuestra atención", y les explicó que Dios es un Padre bueno que, a través de la encarnación de su Hijo, manifiesta su deseo de que los hombres sean realmente libres y se sientan "siempre protegidos como hijos de un buen Padre".
Francisco indicó que en su plan divino Dios necesitó de una persona humana. "Una mujer, una madre -observó-, que ponga en el mundo al Hijo. Ella es la Virgen María, que honramos con esta celebración vespertina. María fue totalmente libre. En su libertad ha dicho 'sí'. Ella ha hecho el bien para siempre. Así ha servido a Dios y a los hombres. Imitemos su ejemplo, si queremos saber lo que Dios se espera de nosotros sus hijos".
La peregrinación juvenil
El programa para esta peregrinación juvenil de monaguillos, jóvenes de entre 12 y 27 años, incluye funciones religiosas, visitas guiadas sobre temas de historia, cultura y espiritualidad y excursiones culturales y religiosas, entre las que se destaca la visita a Asís. Se trata de una forma de "reforzar el potencial espiritual del importante grupo de la pastoral alemana que cuenta con más de 430.000 niños, adolescentes y jóvenes adultos comprometidos con el servicio al altar", explicó uno de los obispos participantes de la peregrinación.
Los jóvenes llegaron a Roma acompañados de 25 arzobispos y obispos de diócesis alemanas. Entre ellos monseñor Michael Gerber, obispo auxiliar de Friburgo, quien explicó en declaraciones a Radio Vaticana que este encuentro es "una alegría profunda" para los monaguillos y que “los ayudará a tener cierto sentido de responsabilidad, que crece con la edad en relación a este servicio", porque en Alemania, a menudo, "los monaguillos prestan servicio por más de diez años".+
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