NUBARRONES

La escasa conquista gremial de estos días exibida por Hugo Moyano ante sus pares, lo obligan a endurecerse con Cristina de Kirchner. Por ahora en el discurso. Y tampoco muy frontal. Solo veladas amenazas a un gobierno que no se ha cansado de favorecerlo. Muchos de los dirigentes gremiales del Secretariado de la C.G.T. que lo increpan por la falta de respuestas del gobierno en materia salarial real, suelen encontrarse con una argumentación un tanto gastada acerca de que "es lo que hay", "que le vamos a hacer", "no nos vamos a poner a tirar piedras ahora", etc., etc. Como se verá, es la lógica de siempre recostarse contra el poder de turno, con sus más y sus menos. Un desplante por aquí, una extorsión por allá. Y así, los dirigentes-empresarios de casi todo el gremialismo argentino, han hecho fuertes y rentables sus organizaciones sindicales y se han enriquecido muchos de ellos de manera ostensible. No va a ser ninguna profecía, pero es seguro que esta C.G.T., que ha sido la primera en llegar al gobierno de Kirchner, va a ser la última en irse. También es sabido que cuando estos dirigentes toman distancia física de un gobierno, este, tiene los días contados. Los dirigentes gremiales tienen dos sentidos que conservan plenamente: olfato y supervivencia o instinto de conservación.